Explorar el encantador y misterioso puente del diablo en Tartu es una experiencia única. Ubicado al otro lado de la plaza del ayuntamiento, el puente de hormigón construido a principios del siglo XX, tiene un valor histórico y estético. La leyenda cuenta que su nombre proviene del profesor Zoge von Manteuffel, quien inició su construcción y cuyo apellido significa Hombre del Infierno en alemán. El puente está conectado al vecino Puente Angelical” por una leyenda común: los cantantes masculinos se reúnen en primavera para cantarle a las chicas. Un paseo por el campus universitario hasta las ruinas de la iglesia católica es imprescindible para disfrutar de la vista. El puente se ve mejor durante la noche ya que está bien iluminado, así que ¡no olvides tu cámara y trípode! Cuando llegues allí podrás ver interesantes versiones de su nombre y tomar muchas fotos hermosas para la memoria. ¡No te arrepentirás!

¿Qué hacer en Tartu Kuradisild? ¿por qué visitarla?

1.- Disfruta de un paseo por el puente del diablo, que es parte del campus universitario de Tartu y su famoso puente angelical.
2.- Explora los antiguos pasajes del parque en la colina sobre el casco antiguo y descubre la historia detrás del puente.
3.- Toma fotografías interesantes al atardecer con el puente iluminado.
4.- Descubre el origen de los nombres de estas dos construcciones, el puente del ángel y el puente del diablo

Recomendaciones:

1.- No te olvides de llevar una cámara para sacar fotos al puente cuando esté iluminado.
2.- Respeta el entorno natural y no subas a la cima para no romper la tranquilidad de este bonito lugar.
3.- Aprovecha la iluminación natural para tomar mejores fotografías y disfruta de esta hermosa construcción arquitectónica.
4.- Escucha los comentarios sobre el origen del nombre para descubrir sus curiosidades históricas más interesantes