Los Jardines del Festival de la Canción de Tallin ubicado en Estonia es un lugar impresionante para visitar. Fue aquí donde hace menos de 30 años, 300,000 estonios cantaron por la libertad. Este lugar marca la historia de los estonios y su lucha por liberarse del sometimiento soviético. Una amplia grada cubierta en forma de concha, con un terreno ligeramente inclinado para que los asistentes tengan una mejor vista, se utiliza para el festival de la canción así como conciertos de artistas reconocidos a nivel mundial como Rod Stewart y Madonna. Los terrenos también albergan el evento anual Ollesummer donde participan muchos artistas estonios. Los jardines tienen una gran magnificencia en la historia reciente de Estonia y es un lugar importante para los estonios ya que celebra el canto coral desde 1869 y reúne a más de 30,000 personas bajo un solo director. Este festival ha sido clave para la independencia estonia frente a Rusia y no hay duda de que vale la pena visitarlo si se tiene oportunidad.
¿Qué hacer en Tallinn Song Festival Grounds? ¿por qué visitarla?
1. Descubrir la historia del lugar y sus relaciones con la independencia de Estonia.
2. Disfrutar las vistas al mar desde la estatua del conductor estonio famoso mundialmente.
3. Visitar el festival de la canción de Estonia, el cual reúne a más de 100,000 personas con un coro de 25,000.
4. Tomar parte en los festivales Ollesummer o Anna, para disfrutar de las canciones populares locales y los bailes populares de Estonia
Recomendaciones:
1. Aprovechar al máximo los terrenos amplios e inclinados hacia el caparazón con vistas hacia el mar para tener una experiencia saludable.
2. Tomar el autobús 1a 8 34a 38 desde el centro Viru hasta Sangarstedion al borde de la bahía, para ver todas las actividades que se realizan en este lugar y disfrutar de sus monumentos e instalaciones exteriores,.
3. Participar en un recorrido en bicicleta desde el casco antiguo para lograr ver áreas a donde no se puede llegar caminando.
4. Visitarlos durante el festival Laulupidu o durante una actuación para experimentar emocionalmente un evento histórico que los Estonios han mantenido vivo por más de 150 años